viernes, 12 de marzo de 2010

Space Invaders


Me dispongo a enseñaros otra joya arquitectónica producida por la vanguardia docente de la Etsam. La información llegó filtrada por el Señor P, quien prometió postear aquí su opinión hace algún tiempo, cosa que al parecer resultó imposible debido a su apretada agenda.
Da igual, la verdad es que esta obra no necesita demasiados comentarios, por este motivo intentaré no ser muy ácido [quien desee podrá comentarla aquí gratis, claro]
Se trata de un proyecto de Ángel Borrego, firmado al amparo de su taller OSS dedicado al estudio del espacio urbano contemporáneo y sus implicaciones económicas, sociales y culturales [ahí es na!] 
Parece ser que para comprender el espacio urbano se fue hacia el sur, a uno de estos ensanches fantásticos para viviendas de veraneo de bajo coste, colgadas de un cerro posiblemente bajo algún tipo de protección ambiental. En este caso se trata del Cabo de Gata, en Almería y me recuerda uno de los más asquerosos y penosos atropellos perpetrado en España en los últimos años: la construcción de un horrible hotel en espacio protegido todavía a la espera de ser derribado. 
Pues bien, en algún lugar no muy lejano a este hotel podemos encontrarnos con esto:

















Parece ser que su afición a los videojuegos de los ochenta y a la ciencia ficción [argumento de su tesis doctoral] le plantearon la posibilidad de permitirse un guiño a la navecita del mítico juego Space Invaders. Por eso el monstruoso alzado hacia el acceso.
Para ser justos hay que reconocer que alguna virtud tiene y es que consigue que la horrible urbanización de casucas de promotora parezca bonita al lado de su nave de ciencia ficción. Todo un logro que sin duda será valorado por Steven Spielberg.

2 comentarios:

  1. Aunque reconozco mi dejadez , no había encontrado imágenes de esta maravilla del actual panorama arquitectónico español pero ya que tú si lo has hecho , procedamos a encender la hoguera.
    Tiene gracia que un personajillo como éste, que se vanagloria de poseer un doctorado en Princeton y pertenecer al selecto grupo de los mejores estudiantes de su promoción( todo esto oído personalmente saliendo de su boquita ( o bocaza)) acabe haciendo CASTAÑAS como esta. Tiene gracia que al sujeto en cuestión se le llene la boca al hablar de ciencia ficción y tecnología y de la aplicación de estas tecnologías en la arquitectura y el urbanismo y acabe haciendo cosas como esta. Una casa que en su discurso habla de todo esto, pero que acaba quedando en un mediocre ejemplo de construcción costumbrista carente de todo interés.
    ¿ Dónde se ha quedado toda esa investigación?
    Por último me pregunto cómo elementos como éste, cuyo mérito no pasa de fantasear sin aportar nada que tenga el más mínimo interés pueden contar con puestos en la docencia y ser “reconocidos” en publicaciones de tirada nacional como arquitectura viva( revista que publicó la casa a la que el post hace referencia ). Mi opinón es que al final NO IMPORTA LO BUENO QUE SEAS, LO QUE IMPORTA SON LOS CONTACTOS QUE TENGAS.

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  2. Ante semejante imagen me viene a la mente un fragmento de una entrevista que le hizo Luis del Olmo a José Luis Sert en los años 80 y que por casualidad oí repuesta hace un par de años; A la pregunta de qué le parecía el estado de la costa española y qué soluciones proponía (y de esto hace 20 años con lo que quizás hoy la respuesta sería aún más radical) el señor Sert dijo que creía que lo que se había hecho era en su mayoría aberrante, pero que tenía una fácil solución: DINAMITA. Continuaba diciendo que existen verdaderos magos de la dinamita capaces de tirar sólo lo que te interesa y dejar la costa como nueva. Pues bien, dinamiteros del mundo, he aqui un ejemplo del espacio urbano a dinamitar contemporáneo, con sus implicaciones económicas, culturales y demás gaitas, esperamos en este blog sus tésis sobre cómo deberían ser dinamitados correctamente. En este caso yo sugiero tomar referencias en la propia ciencia ficción, en la explosión de la estrella de la muerte o incluso en la de la nave de Alien. Seguro que el tal Borrego estaría de acuerdo, seguro que diseñó su casa con éste único propósito, ahora encajan lo de los másteres en Yale y Harvard, este hombre es un visionario.

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